Hace tiempo me hicieron un encargo: un bote para guardar sobres de especias, sopas de sobre, condimentos, etc, que se usan en la cocina. Sólo me encargaron del tamaño, el diseño corrió de mi cuenta. Así que contenta empece con el encargo saliéndome libre de elegir cualquier tema para decorar el bote. Como era para la cocina elegí algo comestible y como era para alguien que adora Japón tanto como yo decidí que tenía que ser un elemento culinario nipón, de ahí el Onigiri. Y por supuesto como toque personal, su aspecto kawaii, no pude resistirme.  El encargo fue todo un éxito y le encantó a la persona que me lo pidió. Pero ¿ Y sino hubiese sido así? ¿Qué es mejor: un encargo muy especificado o uno libre?  Yo la verdad es que prefiero que se me de libertad para crear, de hecho lo que más me gusta es crear mis ideas, pero corres el riesgo de que sólo te gusten a ti.  Sin embargo cuando es un encargo tienes muy claro lo que debes hacer y te ahorras la parte del di...